En este día tardío,
me apresto a buscar, una vez más, mi destino.
El crepúsculo se acerca, las sombras se aproximan.
Busco en la floresta otras sombras,
por el incipiente verdor ocultas.
Salvaje parque (de vegetación, de sentimiento. De pasiones),
al que la primavera me empuja.
Donde estallan ya curiosas flores:
condones y kleenex,
como retoños jalonan los rincones.
Allí me encamino,
Una vez más, empujado.
Por la memoria. Por el deseo.
La lujuria y …
Esa extraña inquietud nunca satisfecha.
Maldición o regalo divino.
Más la tormenta en mi camino interpuesta.
Una barrera. De agua o de juicio.
Mojadas las ganas, a casa regreso.